
Como el gran maestro del poder del juego y el amor incondicional, aumenta los sentimientos de alegría, risas y alegría, así como la compasión por el propio dolor y el de los demás.
Profundiza el poder de sanación y transformación con la respiración, el agua, el amor, la alegría y la meditación. Mejora el recuerdo de los sueños, el desarrollo psíquico, y la comunicación telepática entre las personas y los animales.